El escáner corporal: ¿un striptease para agentes de seguridad?


Amsterdam.- El miedo se dibuja en los rostros cuando el avión se aproxima al aeropuerto de Detroit. Un tipo huraño intenta prender un explosivo. Un héroe desinteresado le arrebata la bomba, extingue las llamas y dice después ante las cámaras: "Con el nuevo escáner corporal no habría llegado a este extremo".

No parece probable que vaya a realizarse nunca un anuncio publicitario similar, aunque sólo sea por piedad. En realidad tampoco es necesario. Muchos expertos parecen estar de acuerdo, tras el intento de atentado con bomba frustrado por los pelos, en que los controvertidos "escáneres del desnudo" pronto serán aplicados en todo el mundo. Un ensayo con escáneres corporales llevado a cabo en el aeropuerto Shiphol en Amsterdam refuerza su postura.

"Fue rapidísimo, no he notado nada", dijo una holandesa rubia de unos 30 años de edad tras salir del "armario de control" hexagonal y abierto en dos lados con el logotipo "L3 ProVision". La mujer que se presentó voluntaria para probar el aparato prefiere que su nombre no sea publicado. "Todo tarda tan sólo unos 12 segundos", dice, elogiando el sistema. "No hay que quitarse los zapatos ni el cinturón. Uno sólo se siente como en un ’striptease’ sólo si piensa a menudo que otros lo están desnudando con la mirada".

Pero, ¿qué sucede con la idea extendida de que el escáner es una "caja para mirones"? Al fin y al cabo la tecnología de alta precisión de los aparatos permite ver a cada persona como debió de ver la multitud al personaje principal del cuento de Hans Christian Andersen "La fábula del Rey Desnudo", es decir, como vino al mundo. El escáner puede ver hasta a través de la piel. Todos los objetos adosados al cuerpo, también armas o explosivos plásticos, se vuelven visibles con estos aparatos.

Precisamente por eso muchos expertos en seguridad exigen la introducción mundial de los escáneres corporales. En controles convencionales con detectores de metales se produce "un preocupante número de deficencias en seguridad y averías", advierte también el presidente del sindicato alemán de la policía, Konrad Freiberg. Críticos, en cambio, se quejan del riesgo de una violación inaceptable de la dignidad humana; algunos hablan de "ciudadanos de cristal".

Los agentes de seguridad que ya manejan un total de 16 escáneres de prueba, en cambio, lo niegan. Es cierto, según admiten, que la primera greneración de los "escáneres corporales" tienen algo de "’peepshow’ institucional". Los agentes que los controlan deben valorar los "desnudos" de mujeres, hombres y niños radiografiados.

El Parlamento Europeo había parado los pies en octubre de 2008 a la Comisión, que pretendía autorizar el uso de estos aparatos para garantizar la seguridad en los vuelos, en parte también por eso.

Actualmente, tal y como sostiene el director de la compañía que gestiona el aeropuerto de Schiphol en Amsterdam, Ad Rutten, en esa ciudad, al igual que en ciudades de los Estados Unidos, o en Moscú, Zúrich o Londres se está probando la última generación de escáneres. "Esta debería provocar que se desvanezcan todas las dudas que alberga el Parlamento Europeo".

Los modernos aparatos no sólo ofrecen buenas posibilidades de detectar explosivos, como los que logró introducir el atacante nigeriano burlando todos los controles convencionales, sino que además están totalmente automatizados. Es decir, que las imágenes escaneadas de cuerpos desnudos, en principio, ya no son vistas por ninguna persona, sino sólo por el ordenador.

En cuanto un escáner detecte algo peligroso adosado a algún cuerpo, emite una señal de alarma. La persona en cuestión, explica Rutten, es sometida seguidamente a un registro convencional, de manera similar a los electrónicos detectores de metales que se aplican todavía en casos de duda.

Además, toda imagen de "desnudo" es borrada en el curso normal del funcionamiento automatizado. Con estas mejoras, al menos eso creen los partidarios de los escáneres, el sistema pronto se impondrá en todo el mundo. Se entiende, asimismo, que con ello afloran esperanzas de hacer "negocios explosivos".

Compañías como el grupo L3 Communications, radicada en Woburn (estado norteamericano de Massachusetts), que con una volumen de negocio de 14.000 millones de dólares (9.700 millones de euros) es el mayor proveedor de aparatos para realizar escáneres de seguridad y que ha puesto a disposición del aeropuerto de Schiphol escáneres de prueba, ve importantes posibilidades a nivel internacional para la nueva generación de dispositivos de seguridad.

Entre las aplicaciones que contempla destaca el uso de escáneres en cárceles, edificios gubernamentales, controles de tráfico, según enumera la publicidad de la empresa. Sus aparatos también son válidos para interceptar terroristas.

El diario de Amsterdam "De Telegraf" informó citando a fuentes de los servicios secretos del Ejército holandés que la red terrorista de Al Qaida ya se ha hecho con uno de estos escáneres para probar con qué clase de explosivos podrían burlar los controles.

Comentarios

Anónimo dijo…
El problema no es que nos vean desnudos sino la SALUD!! y parece que los medios ni se atreven a mencionar que recibir radiación X es dañino para la salud sea en la cantidad que sea! Nos van a freir a radiación!